¿Cómo aplica la indefensión aprendida psicológicamente en el ser humano?

La indefensión aprendida es el resultado de un proceso que, como el propio nombre indica, se desarrolla por experiencias de aprendizaje. Un historial de fracasos ante situaciones laborales puede derivar en una sensación de incapacidad y falta de control, que pueden llevar a las personas a la evitación y/o al no afrontamiento de la situación adversa.

En este post hablamos sobre cómo saber enfrentarse a este tipo de situaciones y como superar la indefensión aprendida en los entornos de trabajo.

Consejos para mejorar la indefensión aprendida en el ámbito laboral

¿Qué es la indefensión aprendida?

La indefensión aprendida, también conocida como síndrome de la indefensión o por su término en inglés learned helpessness, hace referencia a un estado psicológico adquirido mediante un proceso de aprendizaje, que resulta de la dificultad para escapar o evitar un estímulo aversivo (o desagradable). Este aprendizaje, tiene como resultado un comportamiento pasivo a la hora de enfrentar una situación compleja o un determinado problema.

La indefensión aprendida fue descubierta en 1967 por los psicólogos Martin Seligman y Steven F. Maier, quienes realizaron un experimento con los conocidos como ¨perros de Seligman¨. A estos animales se les sometía a una serie de descargas eléctricas que actuaban como estímulo aversivo.

En este experimento vieron que, el grupo de perros que había sido expuesto a descargas inevitables, mostraba grandes dificultades para adquirir una conducta de evitación, incluso cuando las condiciones lo permitían. Años más tarde, su estudio se extendió a otros animales e incluso a seres humanos, mostrando consistencia entre los diferentes sujetos. A raíz de sus resultados, se desarrolló la Teoría de la indefensión aprendida.

La importancia de la indefensión aprendida radica en su relación con la depresión. Según diversos estudios, ambas se desarrollan ante expectativas de incontrolabilidad, o falta de control, para evitar y/o predecir estímulos considerados aversivos. Como resultado, las personas que lo sufren muestran cierta incapacidad para iniciar acciones que permiten evitar situaciones desagradables, y sufren una disminución de la motivación que se acompaña de sentimientos de incompetencia y frustración.

Señales de la indefensión aprendida

La indefensión aprendida se manifiesta por la aparición de pensamientos de derrota y pensamientos irracionales que afectan a la autoestima de quien lo sufre. Asimismo, es común encontrar emociones como el miedo constante que provocan un estado de alerta ante la posible aparición de acontecimientos negativos que resultan incontrolables.

Por otro lado, esta desesperanza, unida a la creencia de no poder hacer nada para modificar la situación, genera una actitud que se caracteriza por una falta de motivación, pesimismo y pasividad, que en muchos casos puede dar lugar a la aparición de trastornos de ansiedad y depresión.

Por qué surge la indefensión aprendida

¿Por qué surge la indefensión aprendida?

En el entorno laboral, es ciertamente común el desarrollo de indefensión aprendida en personas que se encuentran en búsqueda de trabajo, al sentir que encontrarlo no depende de sus esfuerzos. Sin embargo, también puede ocurrir que se desarrolle estando activo, ya que, la cultura de la organización es un factor importante. Así, situaciones de acoso laboral o mobbing, la falta y/o pérdida de apoyo social en el trabajo, o la falta de valoración del trabajo realizado, son algunas de las condiciones que hacen probable su aparición.

Indefensión aprendida y salud mental

La acumulación de experiencias sobre las que no se tiene ningún control y que conllevan la pérdida de algún beneficio, se relaciona con la aparición de problemas de salud mental.

Los trastornos que principalmente se relacionan con la indefensión aprendida son la depresión y los Trastornos de Ansiedad Generalizada (TAG). Ambos, son trastornos que, además de generar malestar, resultan muy incapacitantes para la persona que los sufre.

Cómo superar la indefensión aprendida en el trabajo

Es importante tener en cuenta que cualquier comportamiento aprendido puede ser modificado. Por ello, es importante conocer cómo hacer frente a la indefensión aprendida, tratando de encontrar la raíz de la causa de dicha indefensión y detectando las creencias negativas que afectan a la vida cotidiana e influyen en la conducta. Asimismo, resultaría de ayuda, instaurar un modelo de liderazgo saludable, como forma de prevenir su aparición.

Qué es la indefensión aprendida

Consejos para mejorar la indefensión aprendida en el ámbito laboral

Desde el punto de vista individual, las estrategias para superar la indefensión aprendida en el trabajo deben ir orientadas a derribar posibles ideas irracionales. Cuestionar nuestros pensamientos y buscar las evidencias que los apoyan, puede ayudarnos a sustituir estas creencias por otras más adaptativas y ajustadas a la realidad.

Asimismo, trabajar la asertividad es clave para mejorar nuestras relaciones sociales y, sobre todo, nuestra autoestima. La asertividad implica enfrentarnos a las situaciones que son susceptibles de generar malestar, evitando reaccionar a ellas de una manera pasiva o agresiva.

Desde el ámbito de la organización, es importante generar un liderazgo saludable y una cultura orientada al bienestar de los empleados, de tal manera que se fomente y facilite las relaciones de apoyo entre los miembros del equipo, se valore el trabajo realizado y se prevenga cualquier comportamiento hostil y/o violento.

Desde Stimulus ayudamos a mejorar la salud mental y psicosocial de los empleados, logrando una cultura de bienestar para todos.

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